GRAND SLAM PARIS 2015

El viernes 16 de octubre emprendimos viaje Patri y yo a Paris, a presenciar en vivo la Champions del judo, el mítico Villa de Paris.

En cuanto llegamos a Bercy, para acceder a nuestro hotel entramos en una especie de villa olímpica, éramos como dos grupies rodeados de judokas de élite de decenas de países mundiales, todos ellos haciendo vida de villa previo al grand slam, nos encontramos con el remodelado Bercy Arena, que ahora lleva en su nombre una conocida marca de hoteles.

Una vez en el hotel, comenzamos a encontrarnos con más judokas y técnicos, se respiraba un ambiente relajado, deportivo y muy distendido. Tras el check-in y dejar las cosas en la habitación, salimos al barrio para cenar algo, para nuestra sorpresa acabamos conversando con una de las más laureadas judokas de nuestros días, la estadounidense Kayla Harrison, vigente campeona olímpica, muy cercana y muy amable. Comentamos con ella su pequeña lesión, que le impediría disputar esta edición del prestigioso campeonato.

Tras una cena deliciosa y en gran compañía, paseamos un rato y nos volvimos al hotel, el viaje había sido cansado y mañana el dia se presentaba movidito.

Nos levantamos temprano para desayunar, y en nuestro salón, compartimos viandas con todo el judo internacional, es para un enamorado del judo como yo, bastante impresionante desayunar tan cerca del campeonísimo Kosei Inoue, entre decenas y decenas de judokas que uno acostumbra a ver en internet y en videos.

Tras el desayuno, nos dirigimos al recién renovado pabellón y comenzamos a vivir un ambiente de judo espectacular, los sitios, reservados desde hace meses, bien cerca de los tatamis y rodeados una vez más de equipos y profesionales del judo.

La jornada fue apasionante, viendo combates de altísimo nivel, con un cuidado en presentación, megafonía y con precisión milimétrica en cuanto a la organización pasaron las horas. Tuvimos la suerte de animar en franca minoría a los españoles, y de ver como Julia Figueroa se metía en puestos de medalla, vibrando con ella hasta el merecidísimo bronce.

Fue genial ver en los pasillos del pabellón a los niños corriendo detrás de los judokas para conseguir un autógrafo o una foto, esa ilusión que en España se acostumbra sólo a ver con futbolistas y con otros muy contados deportistas.

Tras la primera jornada, cenamos con dos deportistas del equipo japonés y sus acompañantes, aprovechando para felicitarlas por sus grandes competiciones. Visitamos Paris de noche y acabamos comentando la jornada con los amigos Gabi de Hajime Judo, Pablo Sánchez y Daniel Pions. Aprovechamos la tarde noche para hacernos unas fotos con cracks del judo que nos íbamos cruzando, como Giorgii Zantaraia, Nijat Shikhalizada, Kosei Inoue o Go Tsunoda entre otros.

El domingo fue otro gran dia de judo, los pesos más altos dieron un espectáculo de lo más emocionante, estando los franceses volcados con sus deportistas al 100%, nosotros hicimos lo propio con los nuestros, destacando en esta ocasión nuestro Adrián Nacimiento, que alcanzó un brillantísimo 5º puesto.

La jornada nos hizo vibrar una vez más, en el descanso del mediodía vimos el evento promocional "Dioses del Olimpo" de la Federación Francesa, con todos sus campeones/as olímpicos/as judo presentes, tremenda manera de llegar al gran público con el judo, esta cita era tan sólo un inicio de una gira por todo el país.

Después tocó despedirnos de París, quedando en la retina decenas de horas de judo de alto nivel y la sensación de querer más, de saber a poco los resultados de unos bravos judokas españoles, que se dejaron la piel, las fotos, las enhorabuenas y esa grata sensación de estar en el meollo de un Grand Slam, habrá que volver, París, bien vale una misa o un torneo de judo como éste.

Aquí hace muchos años, tal y como reza esa preciosa medalla en las vitrinas de mi profesor, Tournoi de Paris, de 1973, ya se subió Crespo al pódium, él que después me ayudó a aprender a hacer y a enamorarme del judo.

Qué razón tenía Kayla, os encantará el ambiente de este torneo. Altamente recomendable. Quedáis avisados.

Eloy.